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derecho | 18.02.2012
No se puede decir que el Derecho
no tiene nada que
ver con el amor. Eso
sería una canallada
al ser humano, porque
el ser humano, la persona (ese
centro o eje ideal de
imputación de derechos y
deberes) está hecho
también de amor
. Y el amor es
más una construcción, un
producto de la educación,
de las
relaciones sociales que
algo innato.
No exise amor
si no hay conocimiento
, como no existe derecho
si no hay conocimiento
. El amor no es un
sentimiento y nada
más; es mucho más
. Implica sentimiento
y conocimiento. Un
sentimiento como el
amor no nace de
la nada, un
sentimiento no
es sólo sentir
. El sentir parece
partir de un
conocimiento. “No existe
, arguye Hoffding, y
Roustan lo
ratifica, ningún estado
que sea pura
representación, puro
sentimiento, o
pura voluntad
. Conocimiento, sensibilidad
, voluntad, aparecen
en cada
acto de
conciencia y se condicionan
sin materializarse.”
Carnelutti
propone una
teoría. El amor puede reemplazar al derecho. Sólo
necesitamos derecho
porque no
tenemos suficiente
amor para auto organizarnos
-dice. Y
pone un
ejemplo de
su teoría
:
“¿Por qué
el padre
y el
hijo cristianos, para regular
sus relaciones, aún
las más importantes
relaciones, no necesitan
derecho? Porque, sencillamente, el padre ama al hijo y el hijo ama al padre. Ahora bien, la sabiduría del pueblo traduce amar por querer bien, es decir, querere el bien del amado, lo que no se explica de otro modo que reconociendo que el bien del amado es el bien del amante y recíprocamente. Así el bien del uno y del otro es el bien de la misma persona. Como los ladrillos se mantienen unidos, después que el arco está construído, en virtud de una fuerza interior, también una fuerza interioir une a los hombres y hace de una muchedumbre una unidad: universum, dijeron los romanos, para significar el milagro de la versio in inum, es decir el de las partes que forman el todo.