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sospechoso | 10.12.2014
Entro en el local donde se van a presentar los microteatros "Kontenedores". Pregunto por la entrada, el costo, y a cuales puedo entrar. Me recibe en la puerta un señor de terno, todo enconcertado con su papel. Pregunto a la vendedora de entradas. No es una chica más feliz. Es amable.. Pero no se distingue de otras. La obra teatral que quiero ver "Chicas ligeras", ya no se presenta esa noche. Y prefiero dar un recorrido, antes de comprar la entrada y la obra a ver... Doy vueltas por aquí y por allá. Estoy vestido con un saco verde o café. mi cabello está, como siempre desordenado, y cubre toda mi frente. Miro por aquí, y por allá. Y luego mientras tomo una fotos. Un policía se me acerca y me pide que lo acompañe.. yo me sorprendo.. )¿acaso parezco sospechoso? y sospechoso de qué? Le digo el porque de su petición.. y me insiste en que lo acompañe. Y acepto.. nos dirigimos a las afueras del espacio, intenta abrir una habitación, y esta está cerrada, mira a sus compañeros, que no son otros policías, sino los de seguridad de la obra. y ellos como se miran intentando desentenderse. Abren por fin la puerta e ingresamos. la luz está apagada, pero como es cerca a la puerta y esta está abierta, se puede ver. El Policía me pide mis documentos. Le digo que soy abogado.. y que cual sería el problema, porque me han llevado a una habitación sin luz.. esto y aquello.. ellos ven mi carnet y retroceden... el policía me pide disculpas... y el seguridad del teatro se escabulle, se va.. como escapando al roche... Pero para que me pidan documentos, de todo el pequeño grupo que estaba en el espacio teatral, debo haber parecido un ¿sospechoso? .jjajaja. realmente esto merece contarlo con otras líneas. después...